martes, 14 de mayo de 2013

Tanto tie...

Tanto tiempo. ¿Cómo andas?
Sabía que ibas a volver, esos ojos no se olvidan, no, esas manos no pasan desapercibidas.
¿Cuánto tiempo paso? días, meses, creo... No estoy segura, se sintieron años.  Pasaron tantas cosas en el medio. Pero...
Contame qué se siente, cómo fue, cuándo te diste cuenta... ¿No fue fácil, no?
Que lindo escucharte de nuevo en cada sonrisa. Debo admitir que te extrañé.
Pero para... No te sientas triste, lo importante es que volviste. Y te digo un secreto... Hay un no se qué en tu cara que me dice que algo en vos cambió, estás diferente.
Pero diferente bien eh, no diferente mal. Ese cambio que te llena los ojitos de lágrimas cuando caes en al cuenta de que las cosas siempre van a mejorar. Ese.
Tanto tiempo che... Siento que no puedo dejar de hablar, las palabras salen solas, las letras se confunden y las teclas se me traban. Y eso que el teclado es nuevo... Si, te extrañé mucho parece.
¿Que lindo el día no? ¿Por qué te pregunto eso? Y.. Así no sacamos siempre temitas de conversación, que le vamos a hacer si no me contas nada, y eso que seguro tenes capítulos de drama, suspenso y comedia para mis hojas... Ya te vas a soltar, se que me necesitas tanto como yo a vos. De a poquito, despacito.
Tengo que confesarte algo, me habían dicho que era probable que no vuelvas, que las cosas andaban muy bien por allá afuera, que no tenías ganas de verme como antes. Ah, se equivocaron... ¿En serio me decís? Me alegra tanto escuchar eso. No se porque, no es que seas la única persona que me visita, pero siento que me entendés, que tenemos mucho en común, o mucho complemento, una de dos. Sos especial.
En fin, que lindo verte por acá. Me llena el alma.


- Prometo visitarte más seguido.